México, (ORBITA).- La Organización abogados cristianos Organismo No Gubernamental da a conocer el asesinato de un cristiano evangélico por causa de su fe en el Estado de Chiapas, donde las autoridades han dejado impunes la mayor parte de los delitos relacionados con la Intolerancia Religiosa.
El pasado 28 de mayo, Lorenzo López López, visitó la comunidad de Jomalhó, Municipio de San Juan Chamula, acompañado de dos familiares, a quienes un grupo de católicos tradicionalistas los capturaron y acusaron de “estar predicando el Evangelio”.
Lorenzo López, originario del paraje Betania, Municipio de Teopisca, fue a ese lugar a saldar una deuda que tenía con otro familiar, ya que tenía dos semanas de haberse casado, pero al no encontrarlo, decidió junto con sus dos familiares, esperarlo.
Los católicos comenzaron a rodearlos y acusarlos de querer introducir una religión distinta a la mayoritaria. Sólo sus acompañantes lograron escapar, mientras que Lorenzo López fue capturado por al menos 30 personas, quienes lo llevaron ante las autoridades locales para “juzgarlo” en el Salón de Actos del paraje y decidieron atarlo de manos, torturarlo, lapidarlo, sacrificarlo y finalmente sepultado en un lugar cercano.
El cadáver presentaba huellas de tortura y tenía atadas las manos y el cuello. Fue localizado por la policía dos días después de su asesinato. Lorenzo López era miembro de la Fraternidad de Iglesias Evangélicas “Nueva Esperanza” y, a pesar de que la versión oficial, según consta en la Averiguación Previa 151/IA01/2007, menciona que uno de los detenidos dice haberlo confundido con un “asaltante”, esta Barra cuenta los testimonios directos de su madre, Verónica López Días y de su hermano Juan López López, quienes relataron las agresiones verbales de los católicos ese mismo día.
Invitamos al Presidente Felipe Calderón Hinojosa a no dejarse engañar por sus funcionarios responsables de los Asuntos Religiosos en el país y a que visite los Estados que presentan violaciones, despojos, amenazas, robos, y otros delitos impunes en materia de Intolerancia Religiosa, que encabeza mundialmente Chiapas.
Comprendemos la indiferencia del Gobernador en esa entidad, Jaime Sabines, ya que los agredidos no son sus familiares, pero como hermanos en la fe, de quienes sufren, continuaremos con las exigencias de la creación de una Fiscalía Especial dedicada a sancionar y prevenir los delitos relacionados con la religión, así como vernos representados en la Dirección General de Asuntos Religiosos que depende de la Secretaría de Gobernación.
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