Estados Unidos (Cristianos.Com).- El crítico cinematográfico Peter T. Chattaway entrevistó recientemente al novelista británico Philip Pullman, autor del libro La brújula dorada, el cual le adelantó que en el próximo libro de la serie hablará de Jesucristo.

El libro de Pullman fue publicado en 1995 bajo el título Northern Lights (Luces del norte), y es la primera parte de la trilogía His Dark Materials (La materia oscura), que en los Estados Unidos se editó con el título The Golden Compass (La brújula dorada).

El primer tomo de la trilogía fue llevado el pasado mes de diciembre a la pantalla grande, y pese a la gran controversia que generó la película, La brújula dorada pasó por las salas de cine sin pena ni gloria, recaudando en su primer fin de semana 26 millones de dólares, cuando sus productores esperaban colectar 40 millones.

Antes del lanzamiento de la película el presidente de la Liga Católica, Bill Donahue, hizo un llamamiento a boicotear la cinta, considerando que las novelas en que se basa «denigran al cristianismo y promueven el ateísmo entre los niños». Pero aunque en los libros se ataca claramente a la iglesia, quienes han visto la película afirman que en la versión cinematográfica del libro, las críticas han sido suavizadas por los productores.

Pero pese a que en la cinta se disminuye la crítica a la iglesia, Donahue opina que «esta película es el anzuelo para los libros», que el considera nocivos, especialmente para los niños.

Jesús: El próximo personaje de La Materia Oscura
 En la entrevista que Peter Chattaway le hace a Philip Pullman, le pregunta al autor por qué en su trilogía aunque consigue interpretar ciertos aspectos del Antiguo Testamento de manera bastante literal (por ejemplo Enoch), el personaje de Jesús no aparece en ninguno de los libros. A lo cual Pullman le contestó que «omitirlo de La Materia Oscura fue deliberado; llegaré hasta Jesús en el próximo libro. Tengo mucho que decir sobre él».

El autor no quiso entrar en detalles sobre lo que dirá sobre Jesucristo, pero dejo claro que no cree en Dios y que lo considera más bien como una metáfora. «Yo no espero que los cristianos vean a Dios como una metáfora, pero eso es lo que es- afirmó Pullman. Tal vez quedaría más claro si lo llamáramos un personaje de ficción, y un personaje muy interesante: uno de los villanos más grandes y más complejos de todos: salvaje, mezquino, fanfarrón y celoso, y sin embargo capaz de momentos de ternura y de extremos de cariño arbitrario, por David, por ejemplo».

Con respecto a la crítica que sus libros han tenido por parte de los cristianos, Pullman señalo que «los cristianos del extremo fundamentalista o evangelista del espectro han estado tan ocupados denunciando la maldad de Harry Potter que casi no se han percatado de mí». Y afirmó que «los cristianos del otro extremo, lo que se podría llamar el extremo liberal reflexivo del espectro, por el contrario han acogido el libro muy bien. Muchas de las cartas más interesantes que he recibido son de cristianos, tanto protestantes como católicos, al igual que las conversaciones más interesantes que he tenido. Ellos ven que yo me tomo en serio las grandes preguntas, y que la moral (los valores que defiende el libro en su conjunto) es algo en lo que podemos estar totalmente de acuerdo».

Narnia Vs La brújula dorada
 En ocasiones se ha llamado a La materia oscura la antítesis de Las Crónicas de Narnia, una afirmación que se debe a las constante criticas que Pullman ha hecho sobre las obras de C.S Lewis.

En la entrevista el autor afirmó que Narnia, «es obra de un protestante, un protestante del Ulster, además, para quien la interacción individual con la Biblia y con Dios fue una cuestión de lucha diaria y de cuestionamientos morales sin fin. Eso es la tradición protestante. Así, en Narnia las grandes preguntas son urgentes y vitales: ¿existe Dios? ¿quién es? ¿cómo lo puedo reconocer? ¿qué debo hacer para ser bueno? Yo estoy en total desacuerdo con las respuestas que ofrece Lewis (de hecho, como he dicho, las detesto) pero Narnia es una obra que entraña un compromiso religioso serio, algo imposible en el caso de El Señor de los Anillos».

Aunque los lectores reconocen que el autor es un ateo declarado, afirman que las obras de Pullman promueve valores que los cristianos también apoyan como el amor y el auto sacrificio. Y es por eso que Chattaway le pregunta a Pullman si ¿es posible que él esté del lado de Dios y no lo sepa? A lo cual el autor le responde diciendo: «Sería muy vergonzoso, ¿no?… la tendencia entre los cristianos (y sin duda también entre otras religiones) de pensar que cualquier cosa que les guste en la obra de un ateo o agnóstico declarado es señal de que el ateo o agnóstico en cuestión en realidad está engañándose a sí mismo, y que en realidad es cristiano, sólo que no lo sabe. Pero yo me resisto a esta interpretación, como usted se puede imaginar. Yo no me engaño: los cristianos se engañan. Dios no existe».

Por Fayra Castro,