Por IAN DEITCH | JERUSALEN (AP) — El ministro de relaciones exteriores de Israel acusó el domingo a la Autoridad Palestina de planear un «derramamiento de sangre sin precedente» para el próximo mes después de un simbólico respaldo que realice las Naciones Unidas a favor de la independencia palestina.

Con el objeto de acentuar su advertencia, el canciller Avigdor Lieberman instó a que Israel corte sus relaciones con el gobierno de Cisjordania.

Las acusaciones de Lieberman contradicen otros análisis y posiciones israelíes, y se coloca en marcado contraste con las declaraciones públicas y privadas de los palestinos.

«Ellos afirman que no desean violencia, pero la Autoridad Palestina planea un derramamiento de sangre sin precedente», destacó su portavoz Tzachi Moshe al citar declaraciones de Lieberman.

«Enviarán hordas de personas a tomar por asalto los controles en las carreteras», dijo Lieberman según su vocero. «Israel debería cortar toda relación con ellos», agregó.

El portavoz palestino Ghassan Khatib negó que los palestinos estuvieran preparándose para acciones de violencia. «Esos pronósticos israelíes de violencia no son ciertos. Israel trata de inflamar un falso escenario de lo que sucederá en septiembre», destacó.

«En septiembre, pediremos la ayuda de la comunidad internacional, legalmente y en concordancia con la ley, de las Naciones Unidas para que nos ayuden a poner fin a la ocupación ilegal. Lo que es ilegal aquí es la ocupación, no los intentos de acabar con eso», añadió Khatib.

Lieberman no dio evidencia que respalde su afirmación de que los palestinos se aprestaban para realizar violentas manifestaciones. Moshe dijo que Lieberman sacó sus conclusiones de reportes de inteligencia y de declaraciones pública de funcionarios palestinos.